Logré leer de él, tan sólo dos páginas o un poco más pues apremiaba el tiempo...
De cierto modo J me explicó como era la historia. Pero está no viene al caso.
Sólo que leyendo el clarin de hoy vi una nota del tema y recordé ciertos momentos.
La pasión con la que compró el libro fue muy agradable. Él se fue feliz con su versión original de El Eternauta. Comprada en un kiosko de la calle Florida, asi tambien con otros comics más que llegaron a su vista y a sus manos. Un viernes de febrero, con lluvia y sus últimas monedas del mes. Airoso, feliz.... despues de haber caminado 8 horas desde Santa Fé hasta la Plaza San Martin, luego por Av. Corrientes... hasta que cayó la tarde cuando encontramos un antro, el más feo pero encantador de la ciudad. Ahí, se hallaba un señor muy interesante para nosotros, que compartía con un mendigo del vino de la casa que pidió. Atrás nuestro, un plato con abundante puré de papa con un lomo que se veia bravazo. En realidad, había un tipo disfrutando de ese plato.
Nosotros encaprichados compramos cada quien su Choripan y su Quilmes.
No recuerdo si volvimos tambien caminando, lo más probable es que sí. Nos preparamos para una reuna con sus amigos mexicanos, y nos fuimos de ¨joda¨ para al dia siguiente despertar tan tarde que no habia delivery disponible hasta la siguiente comida ni mucho menos comida en la mesada ni en la heladera. Cada cual más débil que el otro, turnándonos el malestar post juerga por haber sólo comido un fuxin choripan y bebido la vida...
...
y recuerdo tantas cosas
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De cierto modo J me explicó como era la historia. Pero está no viene al caso.
Sólo que leyendo el clarin de hoy vi una nota del tema y recordé ciertos momentos.
La pasión con la que compró el libro fue muy agradable. Él se fue feliz con su versión original de El Eternauta. Comprada en un kiosko de la calle Florida, asi tambien con otros comics más que llegaron a su vista y a sus manos. Un viernes de febrero, con lluvia y sus últimas monedas del mes. Airoso, feliz.... despues de haber caminado 8 horas desde Santa Fé hasta la Plaza San Martin, luego por Av. Corrientes... hasta que cayó la tarde cuando encontramos un antro, el más feo pero encantador de la ciudad. Ahí, se hallaba un señor muy interesante para nosotros, que compartía con un mendigo del vino de la casa que pidió. Atrás nuestro, un plato con abundante puré de papa con un lomo que se veia bravazo. En realidad, había un tipo disfrutando de ese plato.
Nosotros encaprichados compramos cada quien su Choripan y su Quilmes.
No recuerdo si volvimos tambien caminando, lo más probable es que sí. Nos preparamos para una reuna con sus amigos mexicanos, y nos fuimos de ¨joda¨ para al dia siguiente despertar tan tarde que no habia delivery disponible hasta la siguiente comida ni mucho menos comida en la mesada ni en la heladera. Cada cual más débil que el otro, turnándonos el malestar post juerga por haber sólo comido un fuxin choripan y bebido la vida...
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y recuerdo tantas cosas
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quizás tenga que comprarme ese libro y leerlo para mi próximo examen de estructura económica y hacer un paralelismo con distintos autores.
q me trague la tierra.
tan sólo kiero dormir.
q me trague la tierra.
tan sólo kiero dormir.
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